Sangre y púas

El golpeteo constante a causa del viento, contra una puerta cuya madera esta casi podrida, unas ventanas cuyos cristales rotos dejan entrever un poco de luz en la oscuridad de aquella morada deshabitada, que en el pasado fue hogar de un cruel asesino. Un hombre despiadado, sin alma ni corazón, cuyos padres lo aborrecían por sus horrendas acciones, acciones que llevaron al hogar a las más miserable ruina y a la desaparición del linaje familiar.

Siendo el único hijo de un matrimonio con el suficiente dinero como para comprar un estado y todos sus habitantes, este matrimonio creyó que aquello que recibían en sus brazos era una bendición. Pero esta creció y de forma contraria a la naturaleza angelical comenzó a torturar a los seres más inocentes de la creación. Su juego favorito consistía en envolver el cuerpo de los animales en alambre de púas, para verlos forcejear y morir. Naturalmente esta afición fue creciendo hasta experimentar con humanos, los cuales no eran más que esclavos, hombres y mujeres que trabajaban en la propiedad familiar. Sus crímenes pronto despertaron la sospecha de las autoridades y sin la presencia de los progenitores, ya que habían muerto años atrás de manera misteriosa. El único propietario de la residencia era aquel que luego apodarian " Sangre y púas " debido a su método favorito de tortura.

Pero aquellas investigaciones dieron rápidamente su fruto, el cual llevó al arresto y automática ejecución del individuo, quien a causa de la euforia que se respiraba al momento de la captura, se dispuso a aplicar como condena el mismo método que aplicaba el asesino a sus víctimas.

Fue inmovilizado de pies y manos. Alguien le golpeó el cráneo con la culata de un rifle en dos ocasiones, pues se negaba a desmayarse. Cuando finalmente se desvanecieron sus fuerzas, se le despojó de sus ropas, dejándolo solo en ropa interior. Esto sólo por el pudor de las nobles mujeres que en ese momento estaban, pues cuando se le vio aquel bulto protuberante entre sus piernas, los esposos de aquellas mujeres creyeron que no hacía falta exponer las "miserias " del condenado.

Acto seguido, fue envuelto con el mismo alambre de púas que guardaba en su establo, se le apretó lo más que aquellos hombres podían hacerlo, luego él despertó para dar alaridos y vociferar maldiciones, hasta que lentamente y tras dejar un enorme charco de sangre murió.

Su cuerpo fue lanzado en algún sitio sin determinar de la propiedad, los empleados huyeron, la casa se quedó en el abandono hasta el presente, donde algunas personas comentan ver a un hombre muy alto y corpulento caminar dentro de la casa, observando y esperando a alguien lo suficientemente curioso como para ingresar en sus dominios.

La historia del asesino se convirtió en una leyenda que posteriormente fue un mito, una historia para contar a la luz de las velas, en una habitación a oscuras y rodeando de personas temerosas.

Algunos creían que el espíritu del condenado se podía ver en las noches, otros sólo lo negaban, tal vez la leyenda perduró tanto gracias a que la casa se obligaba a mantenerse en pie. Era una atracción visual verla desde afuera, aunque como toda trampa así debía parecer.

Cuentan algunas personas, que una noche de luna llena, cuando el verano golpea en su máximo esplendor y las noches son sumamente calurosas. Aquellas noches donde es preferible dormir cual Adán y Eva antes de la caída. Fue en esa noche donde una pareja de novios decidió experimentar los goces del sexo, su primera experiencia no podía ser en cualquier lugar, ambos escogieron aquella residencia maldita.

El reloj marco las 10:00 pm, según cuentan y la pareja se escabulleron de sus respectivas casas, para encontrar sus cuerpos desnudos en la habitación que una vez fue de sangre y púas.

El golpeteo constante de la cadera del chico que arremetía contra la entre pierna de la joven hacia no sólo sacudir el suelo de madera sino los senos de la joven, los cuales con hipnótico movimiento se agitaban con cada embestida que recibía.

El placer pronto llegó al clímax, el cual llenó la habitación de olores peculiares, los cuales lejos de ser embriagantes se tornaron repugnantes, pues un olor fétido les hizo detenerse, para percatarse que no estaban solos en aquella habitación.

Antes de lograr separar su miembro viril de su amada, la cabeza del enamorado joven fue arrancada de un tirón, la tibia sangre mojo los enormes senos de la joven, quien se ahogó en sus propios gritos, e inmóvil por el peso del cadáver que yacía sobre ella, el cual hace segundos le llamaba "amor" y ahora era el obstáculo para sobrevivir.

Aquél obstáculo fue lanzado contra la pared, tirado cual trasto viejo y la chica desnuda y resbalando sobre la tibia sangre, no lograban ponerse en pie, no lograban entender lo que sucedía, ! La leyenda era cierta ! Lamentablemente era muy tarde para reconocerla, ahora ella sola y vulnerable fue despellejada al roce de las púas que cubrían el cuerpo del ente fantasmal. Sus senos fueron arrancados con las manos, los gritos se perdían en las lejanías y la luna fue el único testigo de aquel horrendo crimen, el cual no fue descubierto semanas después, sólo porqué una parvada de buitres hizo nido en aquella casa. La cual aún golpea su puerta a merced del viento, cuyos sonidos son semejantes a una carcajada de quién sigue siendo saliéndose con la suya después de su muerte.